Una decepción apellidada Biyombo.

Desde hace unos días se venía hablando de la inclusión de Bismack Biyombo, el canterano del Fuenlabrada, en el Nike Hoop Summint. Una especie de partido de exhibición para jugadores "futuribles" proyecto de NBA.

Pues bien, tras unos días de especulaciones sobre si entraba en la lista, no entraba y demás, finalmente Bismack Biyombo y su agente han decidido acudir a esa cita y por tanto no comparecer en dos jornadas de liga ACB muy importantes para el devenir del club con partidos ante el Menorca y el Estudiantes.

El Baloncesto Fuenlabrada lo explicaba así:

"El Baloncesto Fuenlabrada ha recibido notificación oficial del jugador Bismack Biyombo de su decisión de ausentarse del 3 al 11 de abril de la disciplina del equipo de la Liga ACB para acudir a un partido de exhibición en Estados Unidos.
Conforme a esta notificación, Biyombo se ausentará de los partidos oficiales de Liga ACB frente al Menorca Basquet y al Asefa Estudiantes.
En 2009, cuando el jugador ficha por el club y comienza a jugar en el equipo de Liga EBA, se recoge en el contrato que el club facilitaría la participación de Bismack Biyombo en el Nike Hoop Summit durante las dos primeras temporadas de vigencia del contrato (2009/2010 y 2010/2011). El club aceptó incluir esta cláusula porque siempre la entendió como adecuada en previsión de que el jugador durante dichas temporadas pertenecería a los equipos de las categorías inferiores."

Es evidente que el jugador cuando firma por el Fuenlabrada no sabe ni lo que es el dichoso Nike Hoop Summit, pero si su agente, especialista en estas lides. Ya la pasada temporada el jugador del Real Madrid, Nikola Mirotic, cedido por aquel entonces en el Palencia hizo algo parecido a lo de Biyombó como podéis leer en esta noticia.

Pero se acerca la fecha y finalmente Biyombo decide marcharse a Estados Unidos a jugar ese partido. El entrenador Salva Maldonado y el club lo tienen claro: "Si Bismack Biyombo coge el avión para ir a jugar una 'pachanga' de exhibición en Estados Unidos, puede despedirse de jugar en el primer equipo del Fuenlabrada". Palabras netamente claras del entrenador fuenlabreño que no dejan ningún tipo de duda. La cosa va incluso mas allá, el jugador titubea con la posibilidad de marcharse el próximo lunes y estar presente en el partido ante el Menorca, pero Maldonado es tajante. Si la opción del jugador es marcharse y no estar ante Estudiantes, el domingo ante el Menorca vería el partido al completo desde el banquillo. Así a todo el jugador insiste en su deseo de marcharse.

He leido muchas opiniones en estos últimos días al respecto de este caso. Y sobre todo me sorprende la cantidad de opiniones favorables a la decisión del jugador por el hecho de que existía esa clausula en el contrato y Bismack ha decidido ejecutarla.

¿Está en su derecho? Perfectamente. ¿Es ético? Para mi no.

Biyombo tiene la oportunidad de jugar en el primer equipo tras la venta de Batista como recambio de urgencia mientras se busca una incorporación. La mala situación económica del club unido a otros avatares hacen que ese posible refuerzo no llegue mientras tanto, Bismack juega en el primer equipo y de momento da minutos de descanso de calidad a Ayón y Guardia. El club, viendo que la salvación está asegurada decide no malgastar dinero en ningún fichaje y quedarse con el canterano, dandole continuidad en el primer equipo y continuar con su formación como jugador de futuro que asombra a propios y extraños evolucionando a cada partido que juega.

Pero llega la llamada del agente, el momento de decidir si marchar a la "pachanga" o no cuando el equipo se está jugando la posibilidad de entrar en playoff, con lo que ello puede suponer para el futuro de la entidad. Y Bismack elige marchar.

Un impacto a la linea de flotación del equipo. Un grupo que cuanto mas se ha unido como bloque, cuanto mas han desaparecido las individualidades y mas han aflorado las virtudes colectivas, mas logros deportivos ha conseguido. Un grupo que representado en la figura de su entrenador se siente "traicionado", lo individual (la posibilidad de mostrarse en un pequeño escaparate de la NBA) por encima de lo colectivo (meterse entre los ocho mejores equipos de la liga). Y Maldonado no perdona este tipo de afrentas a su grupo.

Ahora este grupo tiene que hacer frente a un nuevo contratiempo ¡otro mas! Cada vez que parece que el cuento va a tener final feliz un nuevo giro inesperado nos coloca minas en el camino de baldosas amarillas.