Esta ha sido sin duda una gran temporada. La que se suponía como de transición se ha revelado al final como una de las mejores de la historia del Baloncesto Fuenlabrada. A un pasito nos hemos quedado de que hubiera sido excelente si nos hubieramos clasificado para la Copa o para los Playoffs, pero finalmente al equipo le faltó un pequeño plus para alcanzar esas cotas.
Hace varios meses, cuando se publicó el calendario de la pasada temporada, muchos éramos los que nos echábamos las manos a la cabeza viendo como para las últimas jornadas el destino nos reservaba a varios de los equipos grandes de la competición y que en caso de estar jugándonos la permanencia, nuestro objetivo principal, lo íbamos a pasar mal, muy mal.
Sin embargo nos plantamos en el mes de abril con la permanencia asegurada y con todas las opciones de luchar por cotas más altas a la vez que veíamos a equipos llamados a esas batallas luchando por sobrevivir (Estudiantes, Cajasol o incluso el Cai).
¿El secreto del éxito? Varios, la verdad. El primero, sin duda alguna, la definición del objetivo principal y la asimilación del mismo por parte de todos los profesionales que conforman el club, el cuerpo técnico, la plantilla e incluso la afición. Todos y cada uno tenemos bien claro que la permanencia es el fin que debe tener este club con los medios que tiene a su alcance. Una clarividencia que no sucede en muchos otros clubes con aspiraciones más altas que se han llevado grandes chascos este año (lease el paréntesis anterior cuando hablaba de equipos luchando por sobrevivir).
Si, es algo de lo que presumir en estos tiempos, pero no viene en nuestra naturaleza. Para llegar a esto también tuvimos que llevarnos la enorme decepción hace unos pocos años de descender cuando precisamente esa temporada la plantilla se hizo para aspirar a playoff. Ese trauma y la posterior "limpieza" del club nos hizo renacer a la vez que establecía un nuevo vínculo entre la afición y el equipo mucho más fuerte.
Con un patrocinador modesto, Fuenlabrada si puede presumir de algo en la actualidad es de tener las ideas claras. Nada de fichajes rutilantes de renombre con su consabido sobrecoste, nada de aventuras que puedan endeudarte y buenas relaciones con clubes "grandes" que puedan cederte a futuribles jugadores importantes para que se vayan fogueando. Aún así queda el pequeño lunar de la cantera que aún no ha dado ningún jugador de nivel ACB. Si bien parece que en un futuro cercano hay varíos jóvenes en la recámara a punto de dar el salto aún nos falta atar este cabo para dar un gran paso más en la estructura deportiva del club. Una cantera fiable de la que pueda esperarse un relevo generacional para la plantilla ACB.
Pero la cosa no para aquí. Aun no ha finalizado la temporada y ya se están haciendo oficiales los nuevos fichajes para la próxima temporada: Voskuil en el puesto de alero en la plaza que dejará libre Brad Oleson, y Batista en la que dejó el ya olvidado P.J.Ramos. Dos fichajes que no vienen sino a confirmar que este club no se para y que antes de que el mercado comience a caldearse nosotros partiremos con la ventaja de llevar los deberes hechos.
viernes, 22 de mayo de 2009
La clave del éxito. 1. El club.
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que sonrisas en esa foto, cuando todavia teniamos incertidumbres pensando en la temporada
ResponderEliminary al final esas sonrisas fueron premonitorias de un buen curso
y ahora a seguir creciendo