¡NO QUEREMOS DESPERTAR!

"Dime que no estoy soñando." Es la frase de la temporada en la ACB. La que pronunció entre sollozos aquel locutor de la retransmisión del Unicaja-Real Madrid cuando entró aquel triple estratosférico. Es la frase que presidía una pancarta de Fuenlabrada Blues en el partido del pasado domingo ante del Joventut. Es la frase que transmite lo que pensamos la mayoría de los que acudimos al Fernando Martín por el mero hecho de que después de todo lo que ha sucedido durante la temporada, la cantidad de zancadillas que se le han ido colocando a este grupo de jugadores y al cuerpo técnico estos han conseguido meterse entre los 8 mejores de la liga ACB.

Pero antes de la siguiente batalla (el viernes a las 20:30 en la Caja Mágica ante el Real Madrid) vamos a tomarnos una pausa, vamos a degustar, saborear lo que ha pasado en estas 34 jornadas porque merece la pena regodearse.

Nuestro equipo ha ganado 20 partidos, la mejor marca de nuestra historia, de los cuales 15 han sido en el Fernando Martin, repito frase, la mejor marca de nuestra historia. Nuestros chicos han ganado a casi todos los equipos de la liga; exceptuando Valencia y Valladolid (vaya, tal vez sean los equipos que comienzan con la letra "v") todos los demás han hincado la rodilla ante los nuestros: Barcelona, Real Madrid, Caja Laboral, Bilbao, Gran Canaria, Joventut, Unicaja, Estudiantes... todos.

Hemos vivido la excelencia, aquel tercer cuarto prodigioso ante el Caja Laboral y también aquel ante el Gran Canaria. Hemos sentido el apoteosis, aquellas victorias ante BarÇa y Madrid, el triple de Valters ante el Manresa, la victoria en Sevilla, el sorpresón en Bilbao...

No me gustaría decir eso de "disfrutémoslo porque no sabemos cuando viviremos algo igual", pero es la realidad. Conseguir un grupo humano tan profesional, tan entregado, tan apasionado por lo suyo, es dificil, muy dificil, pero además contando con todo lo que le rodea, ya es casi imposible.


El domingo se respiraba algo especial en el Fernando Martín. El público quería fiesta, quería marcha. Pero no hablo de peñas, no. Hablo del público en general, del abonado silencioso que acude cada fin de semana al pabellón y que el pasado domingo se libró de todo tipo de ataduras y cantó, saltó y disfrutó como nunca de lo que nos ha regalado este equipo. El público, todos nosotros tratamos de devolverles el cariño a nuestra manera, convirtiendo el Fernando Martín en una fiesta, en alegría pura y dura.

Ahora comienza otro sueño, otro reto: Conseguir nuestra primera victoria en playoffs. Ni me planteo el hecho de que pueda o no pasar. Este equipo nos ha demostrado que es capaz de cualquier cosa, de aceptar cualquier desafío y tengo claro que este no lo van a omitir.