Al menos eso nos han vendido desde que se aprobaran hace un año y se probaran en competiciones como la LEB ORO.
Recapitulemos cuales son estas nuevas normas:
.- Distanciamiento de la línea del triple en medio metro, excepto en las esquinas, donde se secciona el semicírculo al estilo NBA dejando 90cm para los tiradores
.- Cambio de forma de la zona, se reduce anchura en la base bajo canasta y se amplia en la parte superior.
.- Cambio de posición de saque de banda tras tiempo muerto. Se incorporará una nueva marca a cuarto de cancha para estos saques acercándolo a la canasta. Solo será aplicable en los dos últimos minutos del ultimo cuarto.
.- Reducción del tiempo de posesión tras infracción. Cuando tras una infracción del equipo defensor, ya sea falta o pie, queden menos de 14 segundos, el reloj pasara a este tiempo en lugar de a posesión completa.
A priori todas estas pensadas para aportar una mayor velocidad, intensidad en los momentos finales y recuperar el tiro de 2.
Pero analicemos el resultado que han tenido en el experimento de LEB ORO.
En un primer vistazo los porcentajes de tiro de tres no han sufrido una reducción radical, apenas por debajo de lo habitual,
La primera voz de alarma la dio un estandarte como Richi Guillen, denunciando que si la intención era dar mas espacio a los pívots, él había recibido más palos que en toda su carrera.
¿Cómo puede ser si las defensas deberían haberse abierto arrastradas por la línea de triple?
Pues simplemente por que la mayoría de las defensas eligieron cerrarse en lugar de abrirse.
Ante todo hay que tener en cuenta que los auténticos tiradores, Navarro, English, Oleson, Fithc, Bullock,….. no deben notar realmente una diferencia significativa. Puntualmente cada uno deberá adaptarse y tendrá sus tiempos, pero después de unos partidos les veremos tirar con la misma frecuencia y aproximadamente el mismo acierto, incluso tal vez más en función de las defensas que se encuentren.
Por el contrario, los “aventureros” tendrán menos osadía, y gente menos acostumbrada, o que ahora ya tengan problemas sufrirán más penalizando en porcentajes y numero de intentos, en compensación a los tiradores.
Poniéndonos en la piel de los defensores, es “sacrificable” algún triple del killer de turno si te aseguras que no puedan meter balones en la zona, con lo que los rivales han tendido a flotar descaradamente a los exteriores menos peligrosos, para preferir realizar ayudas interiores, negando precisamente el espacio de tiros de dos que se pretendía obtener para dejar que quien quiera tirar de tres lo pruebe.
Evidentemente el cambio de la LEB a la ACB implica que tendrás más y mejores tiradores, por lo que no se podrá flotar a tanta gente, y puede que nos debamos acostumbrar a defensas mixtas caja+1, donde los especialistas perro de presa se revalorizaran.
La otra figura afectada será el alero alto abierto, últimamente conocido como “4 tiratriples”, puesto al que se redirigían tantos jóvenes en formación que hubieran debido ser aleros puros.
Estos jugadores habían dejado de ser determinantes para ser un estandar de juego, y todas las plantillas debían tener por obligación una o dos piezas de dichas características.
Pasados por el tamiz del triple, aquellos que mantengan su porcentaje serán efectivamente un factor diferencial, convirtiendo a sus equipos en peligros de larga distancia imposibilitando que las defensas se cierren y dejando los ansiados espacios.
El resto serán flotados con descaro o deberán acudir a las zonas, incrementando el tráfico hasta que todo se regule en un par de temporadas.
Indirectamente, esta evolución permitirá en unos años la resurrección del tres alto, jugadores capaces de rebotear y tirar de tres que habían quedado sepultados por el 4 abierto.
¿y como nos afecta a nosotros a corto plazo? Pues para empezar en la configuración de la plantilla, los dos últimos años nuestros dos ala-pivots eran abiertos, Mainoldi y Skita, incluso Antelo y Berzins cumplen ese perfil, y Guardia acostumbra a lanzar desde la distancia.
Este año en cambio todo apunta a que la posición este cubierta por Mainoldi y Gustavo Ayon, y me atrevo a pronosticar un ascenso de protagonismo de Ayon, incluso a la titularidad según avance el curso.
Mainoldi deberá de una vez por todas definir su juego, si logra estabilizarse en un porcentaje convincente tendrá mucha más importancia, siendo además decisivo en finales de partido. Por potencial debería estar entre los favorecidos de la nueva regla, pero necesitará endurecerse mentalmente, y sobre todo acudir al arranque de temporada con un mínimo de tono competitivo, ya que hasta ahora ha demostrado tardar muchísimo en coger tono de juego.
Si por el contrario no obtiene rápido esa consistencia sus minutos en pista pueden correr serio peligro, al punto de ir desapareciendo de las rotaciones, siendo Ayon la respuesta a la petición de mayor físico que hacia el mister. Apuesta a doble o nada la de Leo, que tendra que mostrar semanalmente esa furia que solo le hemos visto en alguna enganchada.